La digitalización ha favorecido la diversificación y el nacimiento de start-ups que enriquecen el tejido productivo y la competitividad. La orientación industrial del despacho nos ha posicionado como un buen referente en este contexto, y nos permite participar en proyectos singulares.
En sus etapas iniciales son muchos los retos a los que se enfrentan los emprendedores, y requieren asesoramiento en el lanzamiento de sus proyectos empresariales. Sabemos que la Start-Up necesita plena seguridad jurídica para la correcta implantación y desarrollo de su empresa, de forma que todos sus recursos se puedan dirigir y optimizar en lo que realmente es necesario: el éxito del negocio.
El Despacho presta su asesoramiento a la StartUp desde el departamento de Auditoría Legal y Consultoría de StartUps (DALCS). Analiza su situación legal -con especial incidencia en el sector económico en el que se desenvuelve-, identificando riesgos, solución de controversias, corrección de acciones emprendidas, creación de estructura societaria y del órgano de administración, estructura de inversión, ampliación de capital, elaboración de contratos (incluidos de financiación), tramitación de subvenciones (ENISA), negociación de préstamos convertibles, participativos, etc. Igualmente, el Despacho ofrece a las StartUps asesoramiento del Plan de Marketing y de Negocio, la utilización de su red de contactos institucionales y corporativos, así como la búsqueda de inversores.