Madrid, 11 de diciembre. – Los accionistas minoritarios de Pescanova organizados por AEMEC a través de la asociación PESCANEM se han posicionado en contra de la oferta liderada por Damm que, según informaciones públicas, consistiría en una operación acordeón para reducir capital a cero (o casi cero), luego aumentar con 250 o 300 millones, y con ello adquirir el 51% de Pescanova. El 49% restante se ofrecería a la banca en concepto de capitalización de deuda. El resto iría a quita. Estaríamos, por tanto, ante un arreglo a la medida de unos a cambio del sacrificio de todos los demás, accionistas y acreedores.
Esta operación acordeón supondría la dilución hasta la nada de los minoritarios. De adoptarse esa decisión, los minoritarios estudiarán adoptar medidas legales.
Los minoritarios denuncian que el representante de Damm, el señor Carceller, quiere ser juez y parte, pues forma parte del Consejo que el mismo propuso y que tiene que decidir aprobar una oferta presentada por su propio grupo. En este sentido, los minoritarios han explicado que, si se adopta la propuesta de Damm, aun cuando no vayan a ese consejo los representantes de Damm y Luxempart, el resto de consejeros estarían en una delicada situación ya que su deber es velar por el interés social, es decir, de todos los socios, y no sólo por los de un socio. De producirse ese hecho, se estudiaría exigir las responsabilidades civiles o incluso penales de esos consejeros.
Asimismo, la asociación de minoritarios PESCANEM exige la convocatoria de una Junta General Extraordinaria, que es el órgano donde se debe debatir y acordar, en su caso, cualquier medida de estas características.
La postura de estos minotarios es apoyada también por Peter M. Yu, el primer ejecutivo del Grupo Cartesian, que posee un 5% de las acciones de Pescanova, quien ha declarado que su compañía “no tolerará acciones que beneficien a un accionista singular en perjuicio del resto” y rechaza la “continua falta de transparencia con el resto de los accionistas de la compañía”.